Tu rostro sale del espejo como un ala que abandona el instante. Yo amo tu rostro en el espejo; yo
amo cuanto me está abandonando.
Antonio Gamoneda
Sólo un imbécil no vería la grandeza de Gamoneda.
Publicar un comentario
1 comentario:
Sólo un imbécil no vería la grandeza de Gamoneda.
Publicar un comentario